domingo, 1 de diciembre de 2013

Dilema moral: Libertad de expresión (Resuelto)

Dilema moral: Libertad de expresión

Juan va al instituto Atenea en Ciudad Real. Él lleva sintiéndose mujer desde pequeño, pero fue tan solo hace un par de años cuando se lo dijo a sus padres y familiares. Sus padres lo llevaron al psicólogo pero éste les dijo que era normal y que lo mejor que podían hacer era aceptarlo tal como es. Por eso, ya lo aceptaron y se está empezando dejando a dejar pelo largo y se ha comprado alguna ropa de chica. Al principio, a los compañeros de clase les resultó raro y lo dejaron de lado, incluso hubo un compañero que se empezó a meter con él pero el equipo directivo castigó al alumno y fue expulsado. Ahora todos ya lo ven como a otro compañero más. Pero hay un problema, sus padres han intentado ir a hablar con el director del centro para que al pasar lista lo llamen de otra manera, pueda ir al baño de chicas, o que le den el uniforme de chicas del instituto. Pero Miguel Ángel, el director, se niega porque dice que en el fondo sigue siendo un chico y los alumnos podrían sentirse incómodos.

+ ¿Debería el director permitirle comportarse como chica o debería negarse?

 
 Análisis del problema

         Es un problema complicado, ya que el director está en una situación que debe resolver el solo. Últimamente han estado saliendo en la televisión casos parecidos al de Juan, de chicos que se sentían chicas y viceversa. Para Juan sería muy duro no poder comportarse como lo que se siente después de todo lo que ha pasado hasta llegar ahí. Pero Miguel Ángel debe pensar también en los demás alumnos del instituto, porque ir al baño de chicas, puede no gustar a las alumnas ya que al fin y al cabo sigue siendo un chico y no se sentirían cómodas con Juan allí. Pero al mismo tiempo, si va al baño de los chicos, a parte de que Juan se sentiría mal, a los chicos también puede resultarle incomodo ya que en apariencia es una chica más. Respecto a lo del nombre en las listas, Miguel Ángel se niega porque si no se cambia legalmente el nombre, él no puede hacer nada.

 Argumentos a favor

      Argumentos a favor de que el director le permita a Juan comportarse como chica en el instituto:

·           Juan ya sería aceptado del todo como chica.
·           Todo por lo que ha pasado habrá valido la pena.
·           La gente se olvidaría ya de que es un chico y lo verían totalmente
      como chica.
·           Evitaría que la prensa se enterase para hacer un escándalo del
       tema.
·           Si va al baño de chicos, los alumnos se sentirían incómodos porque
      por fuera es parece una chica.
·           Tiene derecho a expresarse como lo que es.
·           El director no es nadie para que no le permita comportarse como
      chica.


        

 Argumentos en contra

        Argumentos en contra de que el director le permita a Juan comportarse como una chica en el instituto:

·           Las alumnas se sentirían incomodas si va al baño de chicas porque en
      en el fondo es un chico.
·           Aunque se niegue, son cosas insignificantes y podrá seguir
      comportándose como chica.
·           El uniforme es estricto para chicas y chicos, aunque se sientan del sexo
      contrario.



 Solución del dilema

            En mi opinión, yo creo que debería dejarle permitirle hacer todas esas cosas porque tiene derecho a expresarse tal y como él se siente, sin importar lo que piensen los demás. Con respecto a lo del uniforme, creo que da igual lo que seas, porque es solo una cuestión física y no importa, siempre y cuando se sienta como una chica debería llevar el uniforme de chica. Si se negara sería un gran paso atrás después de todo lo que a pasado para que lo acepten y aunque sea director, no es nadie para decirle a otra persona lo que debe o no hacer respecto a temas tan personales. Además, aparte de cómo se sentiría Juan, el director evitaría armar una polémica respecto al tema en la ciudad o incluso por televisión.
Si al final el director le permite comportarse como mujer, al cabo del tiempo todos se olvidarían de lo ocurrido y ya no verían a Juan como un chico vestido de chica, sino como una chica.
Es mucho más importante la felicidad de Juan que lo que puedan pensar la gente a cerca del tema, por eso, yo estoy de acuerdo con que el director Miguel Ángel le permita hacer todo lo que pide.